Los venezolanos están comprando apartamentos en Miami
Estos últimos meses han sido cargados de muchas variantes, y como se dice lo único constantes son los cambios. Aquí en Estados Unidos estas fechas estamos en recuperación de la súper tormenta “Sandy” en las costa este, aparte este mes de Noviembre son las elecciones donde los americanos buscan una recuperación económica.
Después de las últimas elecciones en Octubre 2012 los venezolanos están abandonando la madre patria en números sin precedentes, en busca de una nueva vida en Miami, ahora ya con mucho mas conocimientos por lo que ya esta colonia ha hecho una gran presencia en esta ciudad y le ha abierto el camino a los que siguen llegando. Pero muchos que no se han ido viven de lo mejor gracias a sus inversiones en el pujante mercado inmobiliario de esa zona floridana. Además de lo llamativo que resulta la oportunidad de inversión, ya hasta las posibilidades de conseguir la residencia es posible con inversiones en el área inmobiliario. Los venezolanos están comprando apartamentos en Miami y rentándolos para conseguir aparte de la inversión otra unidad de ingreso en dólares, que es más atractivo que su dinero acumule polvo mientras se desvaloriza en algún banco venezolano.
Expertos de inmigración, abogados y agentes de bienes raíces del sur de la Florida coincidieron en que la reelección del presidente Hugo Chávez provocará un aumento en el éxodo de venezolanos, llevando a que más empresarios busquen residencia a cambio de inversiones y que más compradores busquen propiedades desde Key Biscayne a Weston.
El diccionario de la Real Academia Española de la Lengua define “meca” como “lugar que atrae a la gente por ser centro donde una actividad determinada tiene su mayor o mejor cultivo”. Esa definición capta con precisión aquello en lo que se ha convertido el sur de Florida para los latinoamericanos. Comenzando con los cubanos, esta meca regional ha atraído gente de todos los países del continente, sobre todo colombianos, nicaragüenses, peruanos, argentinos, paraguayos, dominicanos, mexicanos y, claro está, venezolanos.
Salvo por pequeños reductos de cultura latinoamericana, Florida mantuvo su identidad abrumadoramente blanca y protestante hasta que las élites cubanas abandonaron la isla huyendo de la revolución. En los años siguientes, los cubanos revitalizaron el sur de Florida, especialmente los condados de Miami-Dade, Broward y Palm Beach, y esto preparó el camino para otros grupos de latinoamericanos.
El dinero y el poder de la zona, así como su ubicación, clima, diversidad y seguridad, siguen atrayendo inmigrantes latinoamericanos, aunque hasta hace poco la ciudad de Miami había sido para los venezolanos poco más que un lugar donde comprar y descansar.
A partir de la “Venezuela saudita” de los años 70, los venezolanos comenzaron a ir a Miami de vacaciones en grandes números.
Algunos aprovecharon la fortaleza del bolívar para comprar casas de vacaciones. Pero eso era todo: casas o apartamentos que se podía alquilar para cubrir los costos tributarios, hipotecarios y de mantenimiento de los inmuebles, y ocuparlos únicamente durante las vacaciones. El propósito de esas viviendas era servir de alojamiento durante visitas ocasionales y Miami no era más que un lugar en el cual descansar. Los venezolanos dejaron de considerar Miami como un simple destino vacacional aproximadamente desde mediados de los años 90. “Las viviendas se han comprado principalmente como inversión financiera, pero a veces con la idea de mudarse a ellas”, dice. “En los últimos años se han utilizado como medio para invertir y no perder el valor del dinero”. En 2012 los venezolanos están comprando alrededor del 66% de las ventas inmobiliarias de Miami Dade y sus alrededores.
Desde que Chávez fue electo en 1998, el número de venezolanos que ha emigrado legal e ilegalmente a Estados Unidos se ha incrementado de forma constante. Se estima en más de 200,000 el número de venezolanos que viven en Estados Unidos, con un 57 por ciento radicado en la Florida.
Esa cifra podría ser mayor debido a que hay gran cantidad de indocumentados. El total de venezolanos que han recibido residencia permanente se ha ido incrementando año tras año, desde un poco más de 5,000 en el 2002 a más de 9,000 en el 2011, según cifras de la oficina de estadísticas de inmigración del Departamento de Seguridad Interna (DHS).